Aunque en la mayoría de los casos es una dolencia leve, el acné puede provocar trastornos como depresión, ansiedad o fobia social. En cualquier caso, sueñe dañar la autoestima de los adolescentes, los principales afectados. El 40% de ellos se siente acomplejado por un problema que requiere tratamiento médico y apoyo emocional.
El acné es la enfermedad más frecuente del ser humano y afecta especialmente a los adolescentes. Se calcula que 3,5 millones de jóvenes españoles sufren este trastorno multifactorial de la piel. Aunque, generalmente, es una dolencia leve, puede agravarse, condicionar la calidad de vida y provocar otras afecciones. Hay muchas chicas que no se atreven a salir de casa mientras tienen los granos en actividad y, a veces, responden autolesionándose, quitándose las espinillas y haciéndose grandes heridas para solucionar ese efecto visual.
Lo importante es que los jóvenes acudan al dermatólogo lo antes posible para que les trate y, además, hable con ellos. Hablar con ellos es fundamental porque, a veces, el solo hecho de dedicarles un tiempo y explicarles los distintos aspectos de la enfermedad les hace sentirse comprendidos y evita que requieran atención psicológica. No debemos olvidar que los adolescentes magnifican las cosas que les afectan y una pequeña lesión que para el dermatólogo no tiene importancia les amarga la vida.
La adolescencia es una etapa muy compleja en la vida de toda persona en la que la autoestima tiene un papel determinante. En esta etapa, las relaciones interpersonales son esenciales para desarrollar una adecuada competencia social y, por tanto, tener una buena autoestima. Al mismo tiempo, es imprescindible para el joven, la necesidad de sentirse aceptado. Es decir, ser miembro de un grupo social para poder construir su propia identidad social con la que enfrentarse al mundo, sentirse parte de un grupo. El adolescente tiene una elevada necesidad de resultar atractivo. Muchos de ellos tienen una imagen negativa de sí mismos, que puede llevarlos a alejarse de sus amigos y de las actividades sociales. Esa baja de autoestima puede generar comportamientos inapropiados y bajo rendimiento en el aprendizaje.
Pero, ¿qué pasos deben seguir nuestros hijos para evitar que el acné afecte a su autoestima? El primer paso para evitar que el acné afecte al autoestima es que sean verdaderamente consciente de que sus cualidades no se reducen simplemente a tener o no granitos en la cara. Igualmente, es fundamental repetirse día a día que este problema es algo pasajero y puntual que tiene solución. Probablemente lo sufran mientras sean adolescentes, pero acabarán superándolo con el paso del tiempo. Cuando quieran darse cuenta, estarán luciendo una piel tersa, suave y reluciente. Además, es muy relevante adoptar una actitud positiva y recurrir a la ayuda profesional si lo consideráis necesario, así como evitar las situaciones de estrés que pueden agravar el problema.
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